Cantabria es una región enclavada entre el mar Cantábrico y las montañas, lo cual hace que su rica y contundente gastronomía sea un fiel reflejo de su diversidad geográfica y cultural. Desde los productos de la mar, hasta las especialidades de la montaña, cada plato cántabro cuenta una historia de tradición y sabor. No te pierdas este recorrido por los manjares que la gastronomía de Cantabria tiene para ofrecerte.
Platos típicos y especialidades de la gastronomía de Cantabria
Cocido Montañés: El cocido montañés es el plato estrella de la gastronomía cántabra y es conocido a nivel nacional e internacional. Esta receta, ideal para el frío del invierno, se elabora con alubias blancas, berza (que es una variedad de col), y compango, es decir, un conjunto de carnes de cerdo como chorizo, morcilla y tocino. Es un plato que refleja la esencia de la cocina de montaña: nutritivo y reconfortante.
Cocido Lebaniego: Se diferencia del cocido montañés, sobre todo, porque se cocina con garbanzos de Potes y patatas y no con alubias blancas, además de las carnes de vacuno y cerdo. El cocido lebaniego es típico de la comarca de Liébana. A veces se acompaña de una sopa hecha con el caldo resultante de la cocción y se sirve, por un lado, el caldo con fideos y, por otro, las carnes, verduras y garbanzos. Este plato es un homenaje a la rica tradición agrícola y ganadera de la región.
Anchoas de Santoña: Las anchoas de Santoña son famosas en todo el mundo por su enorme calidad y sabor. Preparadas de manera artesanal, estas anchoas en salazón y luego en aceite de oliva son una delicia que no puede faltar en una mesa cántabra. Se sirven solas, con queso, sobre pan tostado, acompañadas de pimientos rojos asados o como ingrediente en ensaladas.
Rabas: Las rabas o calamares fritos, son un aperitivo muy popular en Cantabria. Se fríen en un rebozado ligero y crujiente, se sirven acompañadas de limón y son perfectas para disfrutar en una terraza junto al mar y un buen vino blanco.
Productos autóctonos de Cantabria
Sobaos Pasiegos: Procedentes de los Valles Pasiegos, los sobaos son bizcochos esponjosos elaborados con mantequilla, harina, huevos y azúcar. Son ideales para desayunos y meriendas y su sabor delicioso y único se debe a la calidad de la mantequilla de la región.
Quesada Pasiega: La quesada pasiega es otro dulce emblemático, hecho con leche cuajada, mantequilla, huevos y azúcar y aromatizado con canela y limón. Su textura y sabor recuerdan a un flan horneado y es perfecta tanto para el desayuno, como para el postre y la merienda.
Quesos de Cantabria: Cantabria es tierra de quesos, para todos los gustos, destacando especialmente el queso de nata, suave y cremoso y el queso Picón Bejes-Tresviso, un queso azul fuerte y de sabor intenso, que se elabora en las montañas de los Picos de Europa. Ambos son perfectos para degustar con un buen vino o sidra.
Bebidas típicas de Cantabria
Orujo de Liébana: El orujo es una bebida espirituosa destilada a partir del bagazo de la uva. En Cantabria, especialmente en Liébana, se elabora de manera tradicional y se consume como digestivo después de las comidas. También se utiliza para preparar el licor de hierbas, que combina el orujo con una selección de hierbas aromáticas o, también, con diferentes tipos de frutas.
Sidra Cántabra: Aunque es mucho menos conocida que la asturiana o, incluso, que la vasca, la sidra cántabra tiene un carácter propio. Se elabora a partir de manzanas autóctonas y es una bebida refrescante y ligeramente ácida, ideal para acompañar platos de pescado y marisco.
La Experiencia Gastronómica en Cantabria
Disfrutar de la gastronomía en Cantabria va más allá de la simple degustación de sus platos. Es una experiencia que conecta al visitante con la historia, la cultura y las tradiciones de la región. Desde los mercados locales hasta los restaurantes familiares y las fiestas gastronómicas, cada bocado es una invitación a descubrir la autenticidad y la riqueza de esta tierra.
Mercados locales: Los mercados locales, como el Mercado de la Esperanza en Santander, son lugares perfectos para conocer, de primera mano, los productos frescos de la región. Pescados y mariscos recién traídos de la mar, embutidos artesanales, carnes autóctonas y quesos locales llenan los puestos de estos vibrantes espacios.
Restaurantes y tabernas: En Cantabria, los restaurantes y tabernas ofrecen una cocina que combina tradición e innovación. Desde los establecimientos más tradicionales, donde se pueden degustar platos como el cocido montañés o el lebaniego, hasta los restaurantes de vanguardia que reinterpretan los sabores cántabros, la oferta gastronómica es muy amplia y variada.
Fiestas gastronómicas: A lo largo del año, Cantabria celebra numerosas fiestas gastronómicas que rinden homenaje a sus productos más emblemáticos. Destacan eventos como la Fiesta del Orujo en Potes, donde se pueden degustar diferentes tipos de orujo y disfrutar de la música y danzas tradicionales o el Festival Gastronómico del Mar Cantábrico en Laredo.
La gastronomía de Cantabria es un reflejo de su diversidad y riqueza cultural, así que, ya sabes, haz que tu visita a Cantabria sea completa: no solo se disfruta de sus paisajes y patrimonio, sino también de una experiencia culinaria única, que deja una huella imborrable en el paladar y en el corazón. ¡Ven y descubre los sabores auténticos de Cantabria!